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Sin duda, Melgar es uno de los destinos favoritos de los bogotanos para una escapada rápida, buscando escapar del frío de la capital y disfrutar del calor que tanto anhelan.
Lo que pocos saben es que, a tan solo 20 minutos de Melgar, se encuentra otro encantador pueblo, también con un clima espectacular que lo convierte en el lugar perfecto para seguir disfrutando del calor y la tranquilidad.
Carmen de Apicalá es un pequeño y pintoresco pueblo ubicado en el departamento de Tolima. Es un destino ideal para aquellos que buscan escapar del ajetreo de la ciudad.
A un distancia de Bogotá en carro o autobús de 124 km es decir unas 2 horas 49 minutos, se encuentra Carmen de Apicalá (Tolima), un pueblo adornado por una naturaleza exuberante, un sol radiante y su gente amable que recibe al turista.
Además, es un importante centro religioso, la Virgen del Carmen es mucho más que la patrona del municipio, considerada patrona de los conductores recibiendo de ellos su visita en caravanados diferentes tipos de empresas y vehículos transportadores. Además de sus milagros, cuenta la historia de una vieja casona levantada con paja y bahareque y donde funcionaba la casa cural.
No sabemos quién fue el inspirado escultor, que modelo la imagen que se venera en el Santuario del Carmen de Apicalá. La tradición dice que en los comienzos de la fundación del pueblo (año 1828), se presentó un peregrino que se ofreció a hacer una imagen del Carmen. Los vecinos principales le exigieron que el niño fuera de escultura de madera, lo mismo que el rostro y las manos de la Virgen, pues habiendo escogido a la reina del cielo en su advocación del Carmen, cómo patrona del pueblo
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Carmen de Apicalá es ideal para quienes buscan escapar de la rutina y disfrutar de la belleza natural y la gastronomía local. Este pintoresco pueblo ofrece una variedad de actividades que van desde la exploración de su cultura y tradiciones, hasta la delicia de su variada oferta culinaria.
Gastronomía:
La oferta gastronómica en Carmen de Apicalá es un verdadero festín para los sentidos. Los turistas podrán deleitarse con una deliciosa lechona, el tradicional sancocho de gallina o los suculentos tamales que caracterizan la región.
También pueden probar el envuelto de maduro, el sabroso pan de yuca y acompañar las empanadas con masato y ají, una combinación perfecta que hará que tu paladar se llene de sabores autóctonos.
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Además, platos como la rellena y la fritanga completan el extenso menú que ofrece este municipio, ideal para los amantes de la comida típica colombiana.
Hospedaje:
Carmen de Apicalá también es conocido por su variada oferta de hospedaje, que va desde opciones más económicas hasta alojamientos más lujosos.
Los visitantes pueden elegir entre hoteles con piscinas, hostales acogedores, centros vacacionales, cabañas o casas quintas.
Además, las agencias de viajes locales son excelentes aliadas para ayudarte a organizar tu estadía y aprovechar al máximo lo que este encantador lugar tiene para ofrecer.
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