En la antesala de la final de la Liga de Campeones, Luis Enrique emocionó a millones al dedicar unas palabras a su hija Xana, fallecida en 2019. “Espiritualmente estará con nosotros”, dijo el entrenador del Paris Saint-Germain, en la previa del duelo ante el Inter de Milán en Múnich.
Esa frase, cargada de sentimiento, resonó fuertemente justo antes de que el PSG protagonizara la mayor goleada en una final de Champions: un contundente 5-0 frente al conjunto italiano, con tantos de Hakimi, Doué (2), Kvaratskhelia y Mayulu.
El técnico español mantiene siempre presente a Xana, quien murió a los 9 años víctima de un osteosarcoma, un tipo raro de cáncer óseo. Desde entonces, Luis Enrique canalizó ese profundo dolor en acción, creando la Fundación Xana, que brinda apoyo a familias con hijos que enfrentan enfermedades graves.
Durante una conferencia de prensa previa al partido, el exentrenador del FC Barcelona compartió que su hija sigue viva en su memoria cotidiana: “Hablamos de ella todos los días. Nos reímos, la recordamos. Xana nos ve”, dijo visiblemente conmovido.
El 29 de agosto de 2019, Luis Enrique dio a conocer la noticia más difícil de su vida con una frase que aún hoy conmueve: “Te vamos a echar muchísimo de menos, pero te recordaremos todos los días. Serás la estrella que guíe a nuestra familia”.
Desde entonces, no ha dejado de mencionar a su hija en entrevistas, documentales y publicaciones. En No tenéis ni idea, el documental que protagonizó para Movistar Plus+, compartió detalles íntimos del proceso de duelo: “Me considero un afortunado. Xana vivió con nosotros nueve años maravillosos. Era valiente, divertida, muy competitiva”.
Incluso convenció a su madre, abuela de Xana, de mantener vivas sus imágenes en casa: “Xana está viva, mamá. Tienes que poner sus fotos”, le dijo.
En ese mismo documental, Luis Enrique afirmó: “Aunque no la tenemos físicamente, Xana está con nosotros todos los días. Nos acompaña, hablamos de ella, seguimos riendo con sus recuerdos. Sigue viva en nosotros”.
Una Champions que trasciende el fútbol
El sábado 31 de mayo, el PSG se consagró campeón de Europa por primera vez en su historia. Sin embargo, más allá del resultado, fue la historia personal de su entrenador lo que conmovió al mundo. El triunfo tuvo un significado mucho más profundo: el reflejo del amor de un padre que sigue manteniendo viva la memoria de su hija.
¿Quién era Xana Martínez, hija de Luis Enrique?
Xana era la hija menor de Luis Enrique. A los 9 años, en agosto de 2019, falleció a causa de un osteosarcoma, una forma de cáncer óseo que afecta sobre todo a niños y adolescentes. La familia Martínez Cullell decidió atravesar la enfermedad con mucha reserva y entereza. De hecho, Luis Enrique renunció a su cargo como seleccionador nacional para acompañar a su hija durante esos meses.
Desde su pérdida, el exfutbolista catalán honra su recuerdo y la considera una presencia constante en su vida. Creó la Fundación Xana para asistir a otras familias que enfrentan situaciones similares y promover la investigación del cáncer infantil.
El recuerdo que vive cada día
El diagnóstico de Xana llegó a inicios de 2019, y durante cinco intensos meses, su familia luchó con todas sus fuerzas. La noticia de su fallecimiento fue anunciada con un mensaje breve pero profundamente emotivo: “Serás la estrella que guíe a nuestra familia”.
Aquella noche, en la que el PSG levantó su primera orejona con una goleada histórica, las redes sociales se llenaron de mensajes recordando a Xana. Su nombre y el de su padre fueron tendencia, en un homenaje que fue mucho más allá del deporte.